St. Stephen es una viña orgánica familiar, ubicada al pie de la Cordillera de Los Andes, en la región vinícola del Valle de Colchagua.
Delicioso
Nos centramos principalmente en el sabor, que comienza con el sol, el suelo, la temperatura y el agua.
El Valle de Colchagua, nombrado por Wine Enthusiast como la “mejor región vinícola del mundo”, se encuentra a los pies de la Cordillera de Los Andes en Chile y goza de un abundante suministro de agua pura proveniente del derretimiento de la nieve.
Nuestro rico suelo volcánico es especialmente adecuado para Cabernets. La falta de lluvia durante los meses fructíferos significa que las uvas no se deterioran a causa del moho.
Al combinar todos estos puntos se obtienen las condiciones perfectas de crecimiento para un vino verdaderamente bueno.
Artesanal
Nuestras uvas se cosechan a mano para evitar que se estropeen, así como también para preservar el azúcar y el sabor de las uvas. Nuestro vino se envejece naturalmente en barricas de roble francés de la más fina calidad. Un control riguroso de la calidad y la selección de las uvas del viñedo a la barrica aseguran la calidad y el sabor del vino.
Nuestro proceso de elaboración del vino es artesanal, deliberado y flexible. No hay dos cosechas que sean iguales. Estamos degustando, pensando, evaluando y adaptándonos constantemente con el fin de lograr la major calidad posible de cada botella que hacemos.
Nos esforzamos por elaborar vinos deliciosos, constantes, únicos y memorables.
Natural
Nuestras uvas se cultivan 100% orgánicamente. No usamos conservantes, pesticidas, fungicidas, herbicidas ni otros tóxicos. Los únicos aditivos que usamos en el vino son levaduras orgánicas y sulfitos.
Nos centramos en los métodos agrícolas sostenibles. La rotación reducida de los cultivos, la labranza y nuestro buen método de riego por goteo eliminan el escurrimiento para minimizar la erosión del suelo y el consumo de agua.
El resultado es un viñedo más fuerte, un terroir más robusto, mejores uvas y un vino más sano y de mejor sabor.
Comprometido
Nuestra pasión por la agricultura orgánica, la sostenibilidad y el bienestar general del planeta se extiende más allá de las vallas de nuestro viñedo, nuestra región y nuestro país. Somos un pequeño viñedo, pocos en número, pero hacemos lo que podemos.
Cada botella de vino de St. Stephen que usted disfrute, ayuda, ya que parte de los ingresos van a organizaciones establecidas que trabajan a fin de encontrar soluciones para las preocupaciones ambientales globales.